Con frecuencia Dios responde a la oración en formas que jamás hubiésemos soñado en nuestra imaginación. Considera el siguiente incidente tomado de “Our Daily Bread”
“Un ardiente cristiano en el Japón tenía un sembrado de mil árboles y dependía totalmente de ellos para el sustento de su familia. Una mañana se desanimó al descubrir que sus frutas, casi pintonas, estaban siendo arruinadas por un tipo muy peculiar de gusano; una clase desconocida para él.
Prácticamente cada árbol estaba infestado. Entonces, el hombre reunió a su familia, y todos pidieron con llanto que el Señor les ayudase a solucionar tal problema. A su fe agregaron trabajo. Así que desde el amanecer hasta el anochecer, trabajaron duro exterminando la plaga. Pero aún así los gusanos continuaban multiplicándose por miles.
“Rápidamente fue evidente que sus esfuerzos fallarían. Aquella noche, ellos oraron de nuevo por la ayuda de Dios antes de irse a la cama.
A la mañana siguiente, cuando regresaron al sembrado, quedaron pasmados al ver cientos de extraños pájaros posados y revolteando en los árboles. Hora tras hora devoraron los gusanos sin causar daños a las frutas. Tres días más tarde la familia recorrió el sembrado y lo encontraron libre de tal plaga. Dios utilizó a los pájaros para salvar su cosecha.
Source: Blog